jueves, 17 de abril de 2008

Nostalgiando Utopías


Desde el fondo de mi ser, 11 de diciembre de cualquier año

At.
Sr. Escepticismo
Calle del Desencanto, s/n
S/D

Tengo el profundo desagrado de dirigirme a usted para solicitarle que desocupe mi alma a más tardar el 31 de Diciembre del año en curso.

He intentado en múltiples ocasiones y con diversas estrategias encontrarme con usted cara a cara, para explicarle personalmente los motivos de esta solicitud, pero no me ha sido posible. Sin duda lo que ha dificultado nuestro encuentro es su peculiar estilo, que consiste en mostrar una fisonomía distinta en cada lugar y ocasión.

No puedo precisar tampoco con exactitud en qué momento comenzó usted a infiltrarse en mi manera de pensar y de sentir. Sin embargo, estoy segura que no estaba usted presente en aquellos años de interminables reuniones, agitadas discusiones y arriesgadas propuestas. Aún puedo sentir el calor de las noches de verano, donde la vigilia y el vino barato enardecían tanto el deseo como el fuego de los sueños.

Lo que puedo asegurarle es que, en los últimos años, cada vez que el entusiasmo, la pasión o el mero interés por una causa comienza a asomar en mí, antes aún de que consiga instalarse en mis ojos una mirada nueva, siento en la boca del estómago el oscuro zarpazo del miedo. Miedo a volver a equivocarme, volver a creer, volver a caer en la ilusión del genuino interés por el otro, por la justicia, por la igualdad, y encontrarme más tarde con una realidad de mezquindades, intrigas y ambiciones. Miedo que produce desapego, distancia, ajenidad.

Pero también puedo asegurarle que no me resigno, que buscaré por todos los medios erradicarlo de mi espíritu, porque estoy convencida que su presencia es solo una máscara más de la vejez y la muerte. No estoy lista, creo que nunca lo estaré.

Se despide de usted aliviada, esperando no encontrarlo más en mi camino,

Consuelo Encarnación

PD: Considerese esta misiva como notificación suficiente a los efectos ilegales correspondientes. De no cumplimentarse en tiempo y forma lo solicitado, será expulsado con todo el rigor de las fuerzas de la risa y la empatía.